Para odontología pediátrica: Una gran visión en la boca de los pacientes más pequeños

El uso de las tecnologías más modernas, que presentan una funcionalidad y un diseño que permiten administrar el tratamiento de forma no invasiva y sin provocar estrés a los pacientes, también desempeña un papel destacado. Sobre todo el trabajo en la pequeña cavidad bucal y la limitada capacidad de aguante de los niños durante la intervención representan un reto importante. Con el uso de la microturbina TK-94 L de W&H, los odontólogos consiguen realizar los tratamientos de forma rápida y segura. Además, gracias al reducido diámetro del cabezal y a la construcción ergonómica y ligera, el instrumento permite un tratamiento óptimo de los dientes de leche. Durante una entrevista con la odontóloga, nos ofrece más detalles sobre este desafiante campo de actividad.

A diferencia de lo que ocurre con los pacientes adultos, los niños suelen tener mucha menos paciencia durante los tratamientos odontológicos y, por lo tanto, las intervenciones deben realizarse de la forma más rápida posible y sin apenas provocar estrés. Para facilitar el trabajo con los pequeños pacientes, en la consulta de odontología pediátrica se trabaja con técnicas especiales de modificación de la conducta.

El concepto global de la consulta también está totalmente adaptado a las necesidades de los niños. Los procesos estandarizados y una selección fija de instrumentos garantizan, por ejemplo, que la odontóloga pueda concentrarse por completo en la comunicación con el pequeño paciente y en sus necesidades concretas.

Trabajo rápido y eficiente con los jóvenes pacientes

Uno de los retos más importantes a la hora de tratar a los niños es la necesidad de trabajar en una cavidad bucal pequeña. “Debido a sus condiciones fisiológicas, cuando tratamos a niños tenemos que trabajar en un espacio muy reducido. Por ello, todos los instrumentos deben ser seguros, fáciles y rápidos de manejar. Para los niños, el hecho de que los instrumentos presenten un aspecto inofensivo y apenas generen ruido es un aspecto fundamental”, explica la Dra. Fräßle-Fuchs.

Durante el trabajo diario, la odontóloga utiliza la microturbina TK-94 L de W&H y se muestra convencida sobre todo de sus características ergonómicas. “En combinación con las fresas de vástago corto, el pequeño cabezal de la turbina permite ahorrar mucho espacio, lo que facilita enormemente el trabajo en la boca del niño." Para la doctora, es especialmente importante tener una buena visión del área de tratamiento para poder llevar a cabo las intervenciones de forma rápida y eficiente. El objetivo de cada intervención consiste en conseguir que la duración del tratamiento sea lo más corta posible y que los pacientes no se vean expuestos a un estrés innecesario.

Gracias al diseño estilizado, al peso reducido y al pequeño tamaño de su cabezal, la microturbina resulta ideal para su uso en odontología pediátrica. “Utilizamos las turbinas de W&H en nuestra consulta porque cumplen de forma óptima nuestros requisitos de ergonomía, rendimiento y calidad de iluminación. Desde que trabajamos con los niños siguiendo estas técnicas, el instrumental de W&H solo nos han aportado experiencias positivas”, afirma la Dra. Fräßle-Fuchs.

TK-94 L: simbiosis entre funcionalidad y ergonomía

La odontóloga apunta al hecho de que las caries son la afección bucal más frecuente entre los niños. Los dientes de leche presentan un grado de mineralización reducido, lo que acelera aún más el desarrollo de las caries. Así, debido al tamaño relativamente grande de la cavidad de la pulpa, con frecuencia es preciso realizar extracciones de piezas vitales y endodoncias.

“La obtención de imágenes radiográficas es fundamental para emitir un diagnóstico correcto. Desde el punto de vista clínico, el 90 % de los casos de caries interdental se pasan por alto en los dientes de leche. El objetivo es buscar en el color opaco de los dientes de leche que, en la mayoría de los casos, evitan que se vislumbre claramente una lesión por caries”. Según datos de la Dra. Fräßle-Fuchs, si no se aplica un tratamiento, con frecuencia se produce una pérdida de la zona de apoyo, sobre todo en el área de los premolares.

“Durante todo el tiempo que hemos trabajado con ella, la microturbina ha demostrado ser robusta y tener una larga vida útil. Hasta ahora no ha habido ningún caso de reparación”, declara la doctora con satisfacción. Tan solo en lo que se refiere a la oferta de fresas de eje corto, sería deseable disponer de una gama aún más amplia para aprovechar el ahorro de espacio que ofrece la microturbina de W&H en otras aplicaciones.